"¿Qué tan cara les salió su N64 y su PSOne?", una respuesta a Rulonkobalski, o por qué la historia se debe contar en 64 y 32 bits. | Forum

El Nintendo 64 tenía un costo aproximado de entre 2500 y 4000 pesos noventeros. La diferencia era dónde lo compraras y qué incluía. En aquel entonces nadie hacia conversiones a dolares y las opciones eran comprarlo en tiendas tipo gamela, el palacio de hierro, walmart, sears, etc., obvio en estas era más costoso que, por ejemplo, en el tianguis o en locales menos formales. Otra fuente de llegada fue el paso directo de consolas por la frontera, osea, era más fácil que la gente cruzara al norte, comprara la consola y regresara con ella. Muchos niños de aquel entonces vieron llegar el N64 en la maleta de sus papás junto con barras de chocolate hershey’s y medicamentos para la disfunción eréctil.

En lo personal, el primer N64 que tuve, tuvo un costo aproximado de 2700 pesos, era la versión estandar pero tenía la curiosidad de venir con un par de juegos agregados (Madden 98 y creo que Tetrisphere). La segunda que tuve costó 1800 pesos, obvio, esos ya los pagué yo y fue en una época en la que ya se había descontinuado la producción de la consola, así que era de segunda mano.

El cuento del Play Station fue un caso curioso. Por alguna extraña razón los productos de Sony tienden a ser un poquitito más costosos en México de lo que son en el resto del mundo. Igual, en aquel entonces no veías que la gente comprara convirtiendo a dolares. De igual forma, para el grueso de los consumidores de aquel entonces, videojuegos era sinónimo de Nintendo, y posiblemente Sega y Atari. Sin embargo, el éxito que tuvo el PSX a nivel mundial hizo que llegaran unos cuantos a México a manera de promoción. Basta con decir que en aquel entonces los videojuegos eran vendidos como artículos dentro del grupo «juguetes y artículos infantiles» para que uno se imagine lo que pasó. Los padres, quienes tenían el poder adquisitivo, encontraban más atractivo el PSX que el N64 por obvias razones: 1) era marca Sony, 2) a pesar de ser un poco más costoso al principio resultaba más práctico, 3) lo anterior porque sus juegos eran más baratos, y más variados en tanto que no seguían una línea de antecesores, sino que eran franquicias nuevas o emergentes o de series y películas llevadas a juegos, 4) la consola y el concepto en sí no eran tan complicados y estrafalarios como los del N64.

Finalmente lo que acabó de darle súper poderes de mercado al PSX fueron dos cosas: que tenía juegos exclusivos muy atractivos con géneros que no se veían en al N64 como el survival horror, y que la piratería de juegos de PSX comenzó pronto y era muy común en comparación con la de juegos en formato de cartucho. Con todo esto, el N64 siempre fue más popular en sentido «comercial» pues como decía, en aquel entonces los videojuegos era considerados como «juguetes» costosos, destinados a niños y jóvenes, y a los niños les gustaban las cosas que Nintendo ofrecía. Muchos niños que tenían PSX preferían cambiarlo junto con muy buenos jueos por un N64 con Pokemon Stadium o Super Smash Bros., por otro lado, el PSX siempre fue el favorito de quienes de hecho podían pagar una consola.

Obviamente el PSX se quedó mucho más tiempo que el N64, y aun más con la reedición de la consola, el PSOne. El primer PSX que vi comprar a alguien tuvo un costo de 3200 pesos noventeros, no incluía más que la consola y un juego (tan insignificante que no lo recuerdo). El siguiente del que supe fue la versión Dual Shock, que era básicamente lo mismo pero con los nuevos controles con vibración y sticks análogos. El precio fue el mismo. Finalmente yo me hice de un PSOne ya entrada la generación siguiente, el preico fue de 1100 pesos de inicios del siglo XXI e incluía memory card, dos controles y una cantidad ingente de juegos piratas.

La época de despunte de estas dos consolas fue un caso especial. Era una época en la que el mercado no era tan abierto, no había tanta prensa sobre el tema, y la que había era dirigida a un grupo muy reducido. Finalmente, era fin de siglo, la mayoría pensaba que en 3 años la internet nos iba a comer los cerebros y que el futuro de los videojuegos era solo uno: realidad virtual. El tiempo nos desencanto, con un Game Cube que no fue lo que todos esperaban, un Play Station 2 que no se conectaba a internet, un Dreamcast que nació muerto y un XBox que le metió sabor a las cosas. Al final N64 y PSX fueron los que marcaron el ritmo actual con un costo aproximado de la mitad de lo que nos cuesta ahora una consola.