Continuación Día 20 | Forum

Disparé hacia el lector de huellas digitales de la puerta, este no tardo mucho en sacar chispas por los disparos y las puertas se entreabrieron, por lo que pude patearlas para terminar de abrirlas. Las alarmas contra incendios empezaron a sonar y a diferencia de otras corporaciones, nosotros tenemos otro tipo de protocolos para estos casos, se deben asegurar todos los archivos de las investigaciones como prioridad.

Veía a varios miembros del personal de seguridad subir desesperados las escaleras…por lo que deduje que el elevador había sido dañado. Ahora la pregunta es: ¿Cómo subo un edificio de 80 pisos a toda velocidad?

-¡EL ALMACÉN!

Crucé rápidamente el lobby del edificio para llegar al almacén, los de seguridad ya estaban transportando toda la tecnología a camiones blindados para trasladarlas a lo que yo llamo: Base Número 2. En el almacén guardamos toda la tecnología que nos ayuda a nosotros los «SHARKS» a cumplir con nuestra misión, dependiendo de que misión sea se usa un aparato distinto. Es este lugar donde la magia y la tecnología encuentran un punto neutro, pues bien los inventos que guardamos aquí, son de uso exclusivo para nosotros y los fines de la corporación, tecnología demasiado avanzada.

-¡SHARK en persecusión no estorben!

Gritaba una y otra vez mientras sacaba mi identificación como SHARK y me abría paso através de los guardias. Sin embargo estos ya habían empacado casi todo. Y fue entonces cuando la ví: la «Debazer». Una moto construida para tener tracción sobre cualquier superficie…o almenos así la presentaron. Si bien nunca hubo oportunidad en el pasado para probar al 100% su poder…que mejor que escalar un edificio cubierto con espejos por cerca de un cuarto de kilometro.

¡PERO QUE DEMONIOS! ya estaban cerrando el camión con la Debazer. Esto no es bueno; corrí hasta el camión antes de cerrarse la puerta, salte hacia la moto, coloque mi identificación sobre el tanque, ya que esa era la llave y rogué al cielo estuviera cargada con gasolina.

-BRRRRRR

Escuché el motor encender y sin perder tiempo, aceleré a todo lo que pude y salí disparado del camión en dirección al lobby. Una vez que salí del edificio me topé con los restos de la explosión aun cayendo…demonios, había perdido mucho tiempo. Volví a acelerar y embestí la pared con la moto; no sufrió muchos daños, pero no estaba escalándola; aceleraba y aceleraba, hasta que por fin la llanta delantera empezó a levantarse sobre la pared y así comenzé mi ascenso vertical.

Iba a buena velocidad, solo que había un problema: que la moto se adhiriera a la superficie, no significaba que yo estuviera adherido a la moto…Así que ahí estaba yo, colgando del manubrio sin soltar el acelerador mientras me acercaba al hueco que había dejado la explosión. Mis brazos no podían más, los sentía de mantequilla, derritiéndose con cada segundo, afortunadamente me encontraba ya lo suficientemente cerca; la moto se atasco al llegar al hueco y pude dar un salto hasta el principio del piso.

Toda la escena era chorros de agua cayendo del piso siguiente por causa de las alarmas de incendio. El piso entero estaba devastado. Tenía que moverme con cuidado, era muy posible que la estructura se encontrase débil.

Solo me preocupaba una cosa: ¿ella estará bien?

Iba avanzado poco a poco, volví a desenfundar mi pistola, buscaba sobrevivientes, pero al parecer el piso estaba solo; fue entonces cuando vi una figura, cubierta de una armadura negra, que se levantaba entre los escombros; y lo supe de inmediato, ese no era de los nuestros. Apunte rápidamente a su cabeza y comencé a disparar, pero mis disparos solo rebotaban en su armadura.

-¡PERO QUE CAYAPAS!

Exclamé con mucho asombro al ver que no le causaba daño alguno; me concentré en un solo punto de su casco, esperando quebrarlo, pero no conseguí nada. Y obviamente el extraño no se iba a quedar quieto viendo como le disparaba y con los de seguridad…espero que cerca. Así que se dio a la fuga y empezó a correr; lo perseguí por el resto del piso y justo cuando pensé que lo tenia acorralado, se fue directo contra una pared y colocando sus manos sobre de ella, cortó la pared como si estuviera hecha de papel.

-…¡wtf!

Siguió avanzando a través de las paredes y yo en un intento por alcanzarlo trataba de no perderle de vista, mientras ella iba destrozando los muros conforme se los encontraba.

-¿Quién demonios es este sujeto?

Aunque por la silueta de la armadura se trataba de una mujer, pues esta estaba ceñida y marcaba las curvas de una mujer esbelta. Llegó al otro extremo del edificio, puso las manos sobre el cristal, lo quebró y dió un salto al vacío. Cuando llegué al borde de la ventana alcancé a ver un planeador negro alejándose del edificio, se había escapado. Apunté hacia el planeador y disparé las ultimas balas que le quedaban a la Malagueña. Lo logré dañar, pero no lo suficiente para que evitara su huída.

El personal de seguridad llegó inmediatamente y se dividieron en dos escuadrones, uno dedicado a buscar sobrevivientes y el otro a rescatar la información de los ordenadores. No había tiempo para explicar mi encuentro con el extraño y comencé a buscar sobrevivientes en el piso…para ser más exactos, me dediqué a buscar a *****.

No pasaron ni 10 minutos cuando uno de los de seguridad dijo:

-¡Están en el piso de arriba, apilen cosas pronto para poder subir!

Mientras unos seguían subiendo por las escaleras, otros apilaron los despojos de los muebles para llegar al piso siguiente mediante un hueco que la explosión dejó. Trés de mis compañeros bajaron primero, ellos eran también SHARKS. Fui con ellos y pregunte cuantos más se encontraban allá; para mi alivio me contestaron que la mayoría en los pisos de logística e investigación, que eran donde la explosión ocurrió, se habían trasladado a los pisos superiores por cuestiones de mantenimiento minutos antes de la explosión. Sin embargo, el número de muertes que me escatimaron era de varias decenas.

Todos en el lugar se encontraban con emociones combinadas, pero mi cara fue de alivio total cuando la vi bajar ayudada por mis compañeros, a través del techo.

Fue entonces cuando más relajado decidí contarles a mis compañeros sobre mi encuentro. Y de inmediato organizamos a todos los SHARKS para buscar al culpable.