El Pistolero, Capítulo Uno | Forum

Primera Parte

Un Nuevo Comienzo

1

John despertó y se dirigió a la oficina del sheriff, tocó la puerta y el sheriff abrió.

-Buenos días sheriff.

-Buenos días John, ¿qué lo trae por aquí?-dijo el sheriff mientras se colocaba el sombrero y se ponía el cinturón con el revólver-. ¿Qué lo aqueja hijo?

-No he llegado a la ciudad por mera casualidad.

-Bueno hijo, si va a trabajar para mí-dijo el sheriff mientras sacaba una botella de ron blanco de su escritorio y lo servía en dos vasos-. Entonces tiene que decirme sus motivos.

-Muy bien señor-dijo John mientras tomaba el vaso que el sheriff le dio-. Estoy buscando a un hombre, ese hombre asesinó a mi padre cuando yo tenía 15 años de edad.

-Lo lamento mucho hijo, si me permite preguntar, ¿cuál es el nombre de ese sujeto?

-Dutch Willingston, ¿por qué la pregunta sheriff?

-Porque ese hombre se oculta cerca de aquí.

El cerebro de Harlow se encendió, era lo que quería escuchar, que el asesino de su padre, el hijo de puta que había asesinado a su padre estaba cerca de él, y que por primera vez en su vida, a sus 21 años de edad podía eliminarlo o morir en el intento, la lluvia que hasta ese momento era ligera, casi sólo una pequeña brisa se intensificó, los ojos de Harlow se encendieron y entonces supo que tenía que ir tras ese hombre.

-¿En dónde sheriff? ¿En dónde se oculta el cabrón?

-En una fortaleza, una fortaleza al suroeste de aquí, una fortaleza llamada Twin Spades, era la fortaleza de otra pandilla de bandoleros, la banda de Williamson, Eliah Williamson, el hijo de puta más temido en todo West Duston, pero eso fue hace mucho, cuando yo tenía 21 años de edad, en ese entonces había otro sheriff y otro pistolero como usted hijo, uno que no temía hacer justicia por sí mismo, uno que podía contra cualquier hombre, uno que podía desenfundar a la velocidad del rayo, el viejo pistolero, la leyenda del oeste, pero bueno, los rumores dicen que se ha marchado a México, o como le decimos aquí, Nuevo Orgullo, he ido una vez solamente, pero debo decirle que es hermoso, en fin, el pistolero del oeste se llamaba Syd Ricketts, la verdad un nombre poco usual, pero era un justiciero, detuvo a los Carniceros Peterson hace unos 20 años, debo decirle hijo que yo ya soy viejo, tengo 55, pero sigo sano como un toro, entonces, hablando de Syd, ese hombre también detuvo a Eliah, aún así también hay otros rumores que dicen que ha muerto hace un tiempo, pero yo no me preocupo por eso, cabalgué un tiempo a su lado, éramos compinches, detuvimos a varios bandidos de poca monta, pero esos tiempos terminaron hace mucho, el punto es que es una misión suicida ir a por Dutch usted solo, no podrá sobrevivir, necesita ayuda de varias personas, pero antes de eso, lo necesito en la cuadrilla, en serio un tipo como usted me vendría bien en mi equipo.

-Muy bien sheriff, me ha convencido, es hora de imponer la ley en New Duston.

-Me gusta su actitud hijo, en fin, creo que deberíamos ir al salón, hay algunos buscapleitos allí, compinches de Walton, John Edwing Walton, venga, tal vez incluso podamos dar con Walton.

Salieron de la oficina, la lluvia seguía incesante, el clima de New Duston era lo más atractivo para Harlow, ya que él siempre había preferido la lluvia, entraron el salón, el sheriff, se sentó donde Harlow se había sentado el día anterior, Harlow lo acompañó y entonces el sheriff le indicó a quién buscaban.

-¿Ves a esos hombres sentados junto a la puerta?-dijo el sheriff señalando a unos hombres bebiendo una botella de Whisky-. Esos son hombres de Walton, tal vez alguno nos dé una información.

-¿No sería mejor esperar a ver si llega Walton?

-Puede que tengas razón, espera, creo que lo veo, sí, es él-dijo el sheriff volviendo a señalar hacia la puerta, en la cual había un hombre enfundado en un traje con sombrero de copa-. Ese gilipollas de traje es Walton.

-Pero se ve decente.

-Las apariencias engañan hijo, tan sólo son un cascarón de la verdadera forma del humano.

-Entonces, ¿qué deberíamos hacer?

-Esperar a que terminen de hablar y seguir a Walton.

-Me parece una buena idea.

Esperaron unos 10 minutos, entonces Walton salió del salón y ellos también, afuera vieron que se dirigía al norte del pueblo, pasando la oficina del sheriff, montaron sus caballos y lo siguieron a paso seguro, entre la lluvia que hacía fangosos a los caminos de tierra, Walton era reconocido por saquear granjas y por violar a varias mujeres en zonas aledañas a Fayes City, necesitaba ser detenido por sus crímenes recientes, Harlow y Winston llegaron a la guarida de Walton, se ocultaron tras una roca en la ladera y comenzaron a disparar.

-Harlow, no mates a Walton, lo necesitamos vivo, ese hijo de puta tiene que pudrirse lentamente en la cárcel.

Los revólveres tronaron, Harlow se cargó a un hombre… dos hombres… tres hombres, subió a la cabaña en la cima de la ladera y allí estaba Walton, con una escopeta de doble barril en las manos, Harlow derrumbó la puerta y le disparó en las manos a Walton, entonces lo ató con el lazo y lo puso en el lomo del caballo del sheriff.

-Muchas gracias John, sabía que me ibas a servir al momento de buscar bandoleros, ahora que lo pienso, necesito un hombre en un rancho un poco lejos de aquí, Roberts Ranch, la banda de los gemelos Odelaire ha causado estragos últimamente por esa zona, necesito que vayas, además también pueden darte más información acerca del hombre que buscas, nos vemos después Harlow.

-Con que un rancho, suena interesante, tal vez iré después de comer algo, además necesito un mapa para poder llegar.

Silbó y su montura llegó, le tenía la confianza suficiente como para responder al silbido, subió a su caballo y volvió a Fayes City, comió algo en el salón y fue a la tienda a ver si podía conseguir un mapa de su posición actual y tal vez de New Elizabeth, para su suerte el tendero tenía uno, compró el mapa y se puso en marcha hacia el rancho antes mencionado por el sheriff, si el hijo de puta estaba cerca de él, necesitaba toda la ayuda posible, los truenos no paraban de sonar, y los relámpagos relucían en la lejanía, los caminos eran fango, tal vez en el rancho encontraría ayuda y respuestas a lo que él buscaba.