Bloodfear: una mala decisión. (Cuento para Zayakanito) | Forum

Bueno aquí esta la historia que le hice a Zayakanito, debo de admitir que es un poco cruda y posiblemente no digerible para cualquier niño, pero en estos tiempos ya los niños no se asustan con facilidad… son más «precoces», algo así como adolescentitos (Todo por culpa de la leche de caja, uno de estos días publicare ese dato). Bueno sin más preámbulos ahi esta la historia, espero que les guste y cualquier duda y/o comentario es bienvenida. 

Bloodfear: una mala decisión.

Era un día como cualquier otro, todos mis amigos jugaban futbol en la calle, mientras yo ayudaba a mamá a bajar del auto las cosas que había comprado en el supermercado. Mientras tomaba una bolsa vi que caía de ella un folleto el cual decía “Niños desaparecen misteriosamente en la ciudad… ¿señora, sabe usted dónde está su hijo?” en él se mostraba la imagen de una calle desierta con una pelota abandonada y unos papeles tirados por ahí, esa imagen me recordó que tenía que darme prisa, que mis amigos me estaban esperando para jugar con ellos, entonces tome las bolsas y corrí a la cocina para deshacerme de ellas ahí, pero cuando iba saliendo mi mamá me llamó…

-¿Tsuri a donde crees que vas?

– A Jugar con Jackson y los demás niños, me están esperando

– No, no iras ya es tarde, son casi las 8 de la noche, mejor ponte a hacer tu tarea que no te he visto hacerla el día de hoy

– Mamá!!, es muy temprano y no tengo tarea… anda siempre salgo a esta hora a jugar

– Pues de hoy en adelante no saldrás después de las 8, las calles ya se han vuelto peligrosas, hay gente mala por ahí

– Está bien mamá, ya entendí, me voy a jugar videojuegos a mi cuarto

Mamá solo me observó y no dijo nada más, pero pude ver en su cara una expresión de desesperación y susto, como esas que uno ve cuando en una película de terror el asesino sigue a alguna de sus víctimas. Esa expresión me dejó sorprendido, ya que nunca había visto que un adulto se espantara tanto en la vida real, por lo que me fui sin decir más a mi cuarto. En lugar de jugar como había dicho antes me quede sentado en mi cama, me puse a pensar y por más que intente comprender que era tan malo no pude imaginar nada que pudiese poner de ese humor a mi madre.

Después de un rato llegó papá del trabajo y pregunto a mi mamá donde me encontraba, ella le dijo que estaba en mi cuarto, pero su tono de voz aún era bastante raro, entonces escuche a papá subir las escaleras y rápidamente me hice el dormido, escuche que papá le dijo a mamá que  dormía y le pregunto que porque no estaba en la calle como siempre jugando con los demás niños, ella le dijo que tenía miedo de dejarme salir, que habían desaparecido ya bastantes niños de la colonia, y que temía que yo fuera el siguiente, entonces de pronto comenzaron a hablar más bajo y ya no pude escuchar nada, por lo que después de un rato me quede profundamente dormido.

Al día siguiente fui a la escuela como todos los demás días, pero ese día para nada era normal, una de las razones fue que Jackson no asistió a clases, lo cual fue raro porque él nunca faltaba ni aunque estuviese muy enfermo, él era el mejor de mi clase y mi mejor amigo, no podía imaginar que había pasado para que no se presentara a clases, por lo que saliendo de la escuela fui a su casa, la cual quedaba a dos calles de la mía. Cuando toque la puerta, Luck el perro de la familia comenzó a ladrar, pero nadie me abrió, espere 5 minutos y nada, así que me desespere y tome la llave de repuesto del escondite que Jackson me había mostrado, abrí la puerta y vi que Luck no tenía comida así que eso se me hizo más extraño aún, fui a la cocina y le di un poco de carne a Luck, el cual saco la lengua como muestra de agradecimiento, enseguida me dirigí al cuarto de Jackson y vi el poster de la película que se estrenaba ayer en la noche, entonces recordé que había planeado escaparme de casa con él y unos cuantos amigos para verla en su estreno… diantres creo que por todo el alboroto de ayer con mamá deje plantado a mi amigo, ahora solo esperaba verlo para disculparme, pensando eso decidí irme a casa, ya que ahí no había nadie que me pudiera explicar el porqué falto Jackson.

Cuando llegue a casa vi a mamá esperándome en la puerta, y a un lado estaba la mamá de Jackson llorando desconsolada, me dijo que habían encontrado a mi amigo muerto en el patio trasero, no me dijeron como murió, solo me dijeron que fue horrendo y que en sus ojos apagados se veía una expresión de terror… sinceramente no quise preguntar más estaba a punto del llanto y no me lo podía creer, ¿porque mi amigo?, ¿quien le haría eso?, ¿acaso esto era un sueño?… mi mamá vio mi cara y creo que era muy triste mi expresión porque corrió hacia mí y me abrazo, me quede quieto y no respondí el abrazo. No recuerdo que más paso esa tarde, ya que cuando al fin pude ser consciente de mis actos, estaba recostado en mi cama, decidí levantarme y lavarme el rostro para ver si podía despertar por completo, me asome al comedor y mis padres no estaban, supongo que habían salido con los padres de Jackson y se habían confiado de que en mi estado yo permanecería dormido toda la noche… entonces una idea se me ocurrió, haría todo el recorrido que hizo ayer por la noche Jackson para ver si podía encontrar al responsable de su muerte y denunciarlo o ponerlo en su lugar yo mismo, aunque solo tenía 8 años yo parecía de 12 y tenía la fuerza de uno de 13 años, así que pensé que podría ponerlo en su lugar, además yo podría ser el único que podía resolver el misterio, ya que nadie más que yo sabía los planes que Jackson tenía ayer. Baje cuidadosamente las escaleras, me puse mi chaqueta y mire el reloj, que marcaba apenas las 10 pm, y salí por la puerta trasera, para que mis vecinos no me vieran. Eran las 10:30 pm e iba apenas a la mitad del camino hacia el cine, cuando de pronto algo golpeo mi cabeza.

Desperté de repente, asustado y adolorido, y me di cuenta que estaba atado de pies y manos, no podía moverme, además tenía costras de sangre en la frente, el que me había pegado lo hizo con mucha fuerza, y me hizo sangrar al parecer demasiado. Me quede quieto y solo pensaba que posiblemente esto le paso a Jackson y esto era por lo que mamá no me dejaba salir tan tarde yo solo, estaba triste y asustado… tanto que no podía dejar de llorar, pero eran lágrimas de horror no de dolor, de repente me quede pasmado, alguien abrió la puerta del cuarto donde me encontraba, al principio no distinguía bien que era, pero poco a poco mis ojos lagrimosos me dejaron ver y descubrí que era un sujeto muy grande, una especie de payaso, pero no era un payaso común con cara blanca de esos que se ven en las fiestas de niños pequeños, este era aterrador, tenia los dientes grandes y afilados, el cabello purpura, la cara pálida pero no blanca, su nariz era roja en efecto, pero roja color sangre, parecía que era pintada con sangre de verdad, y sus ojos, eran completamente blancos, los cuales vi y me puse pálido y moje los pantalones, eran aterradores, entonces ese monstruo me observó por un momento, sonrió y me comenzó a decir:

–          Hola amiguito, parece que no te agrado, ¿verdad? (me quede sin palabras, entonces el monstruo se acerco furioso a mí y me dijo)

–          Pues adivina que niñito, tu tampoco me agradas, ¿sabes porque?!

–           No!… (fue lo único que pudo salir de mi boca antes de volver a llorar descontroladamente)

–          Porque no obedeces las reglas, piensas que tus padres las dicen porque si, pues no, todo tiene un porqué y parece que a ti no te importa, así que a mí no me importara hacerte sufrir. (se aproximo hacia mí con algo en la mano, cuando se acerco vi que era una navaja, lo cual me hizo apretar fuertemente los ojos y gritar despavorido)

–          No llores!, se un hombrecito!, y hazte responsable de tus decisiones, decidiste no hacer caso a los consejos de tu madre… pues ahora afróntalo niñato.

Entonces sentí con cada paso que se acercaba a mi mucho terror, grite y llore, luego  pensé en mamá, en papá y en mi muerto amigo Jackson el que posiblemente sufrió lo mismo que yo, cerré mis ojos y aguante hasta el final, no los abrí para no darle el gusto a ese ser de verme con miedo… y para evitar que mamá sufriera más al verme, pensé en que debí de hacer caso, pero ya era demasiado tarde… El monstruo grito al final “un triunfo más para BloodFear” y rió demoniacamente como lo haría cualquier monstruo de película Hollywoodense, eso fue lo último que escuche, antes de que todo lo se volviera negro para mí.

By… Darkstone.