Reseña: Escoria o Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia | Forum

Escoria o Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia

Película: Escoria Director: Jon S. Baird País: Reino Unido Año: 2013. Duración: 97 min. Género: Comedia Negra Reparto: James McAvoy), Jamie Bell, Eddie Marsan, Imogen Poots

ALGUNOS SPOILERS!

En México muchas personas utilizan como máxima personal: “El que no tranza no avanza”. Que no es más que una mexicanada para no usar el rimbombante lema de Maquiavelo: “El fin justifica los medios”.

De ahí que existan personas que lo único que buscan es encontrar beneficio, no importando a quien tengan que quitar de en medio, o que para lograr ascender tengan que realizar acciones deshonestas. Además sienten que el sistema ya esta tan lleno de porquería, que una poca más no se notará.

Y de a poco nos carcome como país, sociedad, e incluso como personas. De uno en uno terminamos nadando en un mar de escoria. De esto habla esta película, de ese mal que negamos, pero que está dentro de nosotros.

Con lo anterior es como se le puede dar una lectura política, a un filme donde en una escena magistral varios policías se fotocopian el pene para que sus compañeras traten de adivinar que órgano pertenece a cada oficial, desvirtuando el ponle la cola al burro y convirtiéndolo en ponle el pito a cada tipo.

Ya en serio, películas como esta son un respiro al Hollywood que intenta ser serio poniendo caras largas en sus películas y llenándolas de frases conservadoras; además se dice ser tan profundo aunque al final se ahoga en un charco de lluvia, diciendo basarse en historias reales cuando tergiversan como les parece mejor a su ideología. ¿Huelen eso? Se llama originalidad.

Escoria está basada en la novela del mismo nombre escrita por el conocido “enfant terrible” de la literatura inglesa, Irvine Welsh. Si para algo tiene la pluma fina el también autor de Trainspotting, es para retratar en un tono un tanto cómico pero también un tanto dramático, sociedades en decadencia donde abunda la droga, el sexo, la violencia, el racismo y los personajes nihilistas.

El protagonista es el Detective Bruce Robertson interpretado por James McAvoy. Robertson es un orgulloso escocés, felizmente casado con una mujer que esta como me la recomendó el doctor, con una hija, y que está concursando por un importante ascenso en el departamento de policía.

Al paso de los minutos, nos enteramos que el detective Robertson, también es un drogadicto, paranoico, machista y trepador. Sin mencionar que esta medicado, y que su medicina es la única droga que no se toma.

El señor Robertson está más que dispuesto a utilizar cualquier artimaña necesaria para eliminar a sus posibles contrincantes para ese ascenso. En esa línea de pensamiento mantiene una aventura -con fetiche de ahorcamiento-, con la esposa de uno de sus compañeros, humilla a su subordinado exhibiendo que su órgano reproductor masculino necesita una lupa para poder verlo, y le hace unas llamadas muy impertinentes a la esposa de su mejor amigo.

Pero como dice ese -ciertísimo- dicho las cosas caen por su propio peso. Robertson debe de enfrentarse a las consecuencias de sus acciones, y más que nada a sí mismo. El clímax es delirante y digno de la pluma de Irvine Welsh, muy oscuro pero acorde a la historia que nos atañe.

 

Escoria se halla en mi lista de libros por leer, así que no puedo decir que tan fiel la adaptación es a libro. Tampoco podria decir si yo hubiera contado esta historia de la manera en que la cuenta…asi que me brincaré esta parte.

Me parece que la película tiene un guion interesante, pero que tiene sus fallos. Este filme al parecer desea presentarnos la tragedia de Bruce Robertson, ¡entonces desarrolla ese personaje! Preséntame su trasfondo de manera coherente, no de repente me saques un conflicto de la nada. Ni me resuelvas toda su tragedia en dos escenas, una escena de menos de 5 minutos y otra sacándome unos personajes de la nada.

La película incluye unas escenas que imitan los efectos de la droga en Bruce, así como en otros personajes, que están muy bien aprovechados. En su expedición a Alemania podemos ver cómo tras la ingesta de éxtasis y otras drogas cambian la percepción de nuestros protagonistas. Sin olvidarnos de aquellas bizarras visiones donde el “huésped” de Bruce, nos transmite su pensar.

Su ritmo trepidante con tomas y ángulos inesperados, la hacen divertida como pocas y captan nuestra atención desde un primer momento. Lástima que este mismo montaje forcé a la trama a ir demasiado rápido, evitando el desarrollo de personajes al mínimo.

Pero si alguien esta alucinante del reparto es a James McAvoy, quien da una interpretación magistral del simpático Bruce. Cuando Bruce sufre McAvoy lo transmite, cuando Bruce goza, McAvoy goza, y nosotros más con su interpretación. Puedo decir sin dudarlo que solo por su interpretación la película merece un visionado. También esta Imogen Poots que es bellísima y se le da una escena para que sobresalga; y Jamie Bell, que siempre es cumplidor. En general los atores son un elección acertada.

Y acertada esta la banda sonora donde encontramos clásicos ochenteros, música electrónica e inclusive la antro con el monologo de Bruce Robertson. Se nota el esmero que se puso en la misma, es seria y surreal a partes.

Pero si de surrealismo hablamos hay una escena que me encanta por lo inesperada y divertida que es.

La esposa de Bruce sube a un auto con David Soul, mientras nos habla de nuestro amado detective. Pero a su señal, el conductor empieza un karaoke, con coro en el asiento trasero. Alucinante.

Es obvio que esta película no es para todos los públicos. Si ves un capítulo de South Park y empiezas a aventarle agua bendita a la televisión definitivamente no es para ti. Si te consideras una persona de “buen gusto” tampoco es para ti. Pero si quieres algo diferente, no te asustan los chiste güarros y no te asustan las fotocopias de penes en primer plano… entonces debes darle un oportunidad.

Solté los lazos que me atan

Ixca