Cine 131: Si yo fuera La Academia

La entrega de los Premios de La Academia está literalmente a la vuelta del calendario y por alguna razón le seguimos dando más importancia de lo que ella misma parece darle al cine. Todos podemos suponer que si yo fuera La Academia (yo, toda la academia) todo esto sería mucho menos glamouroso, terminaríamos temprano y Charlize Theron tendría que ir cospleayada de Furiosa para recoger todos sus Oscares.

Así que, esto no es un pronóstico, no implica que haya visto todas las películas ni que me parezcan lo mejor del año, pero si tuviera que entregar cada una de esas estatuillas doradas, más o menos así estarían mis corajes.

Mejor Película del Año: «Mad Max: Fury Road» 

Empezamos con puras sorpresas. El que «Mad Max» esté siquiera nominada en tantas categorías, incluyendo la de Mejor Película, considerando que se trata de la cuarta parte de una saga dedicada a los automóviles post-apocalípticos australianos es ya todo un logro en sí mismo. Pero independientemente de que hay otros candidatos decentes que se ciñen más a lo que se suele premiar año con año (pienso en «Spotlight» y «The big short»), creo firmemente que en cuestión de méritos cinematográficos George Miller no tiene competencia. Desde la reinvención del concepto original hasta los méritos técnicos, visuales y artísticos de la película en sí, son la épica que el cine lleva años prometiendo sin alcanzar jamás. Yo le daría, obviamente, todos los Oscares, y lo único que espero es que, en antítesis total, no vaya a ser la prolongada, soporífera y poco emotiva «The revenant» quien se lleve la más importante categoría.

Mejor Actor Protagónico: …

Ni a quien irle. Si tuviera que dárselo obligatoriamente a alguno de los nominados, se lo daría a Michael Fassbender porque qué hombre, pero lo cierto es que no vi «Steve Jobs» y tampoco me muero de ganas. Entre las controversias de actores y actrices nominados no me parece que ninguno en esta categoría se destaque en su correspondiente película (aunque lo mío con DiCaprio sea personal, no creo que de su filmografía reciente sea justamente esta película por la que deban darle un premio – y seguro que él lo sabe); y como ya otros han mencionado, creo que hay olvidos importantes en lo relacionado con actores jóvenes. Jacob Tremblay («La habitación») y Abraham Attah («Beasts of no nation») son dos niños con unas actuaciones monumentales que cargan con todo el peso de dos enormes películas y que son injustamente desplazados en beneficio de nombres usuales con actuaciones no demasiado impresionantes.

Mejor Actriz Protagónica: Brie Larson

¿Se imaginan un año en el que no esté nominada Jennifer Lawrence? Ya no recuerdo a quién se lo daban antes de que estuviera ella. Independientemente de las dudas sobre las capacidades histriónicas de nadie (sobre todo de Cate Blanchett, jamás lo dudaría), es un poco triste ver que sin importar cuántas películas se produzcan cada año, invariablemente hay nombres que se repiten edición tras edición. De las nominadas de este año (de las cuales, no tengo ni idea de cómo esté la actuación de Charlotte Rampling) me parece que Brie Larson consigue destacar en una producción interesante, con un papel complejo y de un modo natural, apartándose además del tipo de papeles que suelen premiarse (excepto por aquello de afearse, que sabemos le encanta a La Academia). Además es que las producciones de sus contrincantes tampoco se ayudan mucho a sí mismas.

Mejor Actor Secundario: Mark Ruffalo

La verdad es que no he visto «Creed» y no tengo perdón, pero le daría el premio a Sylvester Stallone con los ojos cerrados. Ahora que, si tuviera que parecer que sé de lo que hablo, entre las opciones tendría que inclinarme por Mark Ruffalo que sin recurrir a explosiones histriónicas consigue en «Spotlight» darle el toque justo de fuerza y emoción a una historia por demás compleja y difícil. En contraposición de que nada se muestra de manera explícita en una película que trata un tema tan escandaloso como el abuso sexual perpetrado por sacerdotes, el viaje emocional por el que atraviesa su personaje, Mike Rezendes, arrastra al público por los aspectos más difíciles de la labor periodística.

Mejor Actriz Secundaria: Jennifer Jason Leigh

Sin poner en juicio que todas las nominadas son buenas actriz, y aunque no esté de acuerdo con todas las decisiones artísticas sobre su personaje, me parece claro que si hay una mujer que se apropia con toda la furia y de una manera excepcional de su personaje, es la única fémina entre ocho odiosos, Jennifer Jason Leigh. La verdadera pregunta, como ya otros han planteado, es qué tan secundario es un personaje sin el cual no habría pasado absolutamente nada de la trama. Parece un caso meramente de estrategia en que se vota por un actor en una categoría menor porque se asume que no es capaz de ganar la categoría que le corresponde (¿un personaje de Tarantino llevándose el Oscar Protagónico? qué escándalo). Y a Rooney Mara le pasa justamente lo mismo porque, ¿cómo competir con Cate Blanchett? No importa que tu personaje salga más tiempo en pantalla, motive la historia y la presente desde su punto de vista: no eres Cate Blanchett y la película no lleva tu nombre.

Mejor Dirección: George Miller

En mi edición utópica de los Oscares, Furiosa también subiría a recoger este premio, obviamente. En la edición real de los Oscares, no me cabe en la cabeza que siquiera puedan dudar que este premio corresponde indiscutiblemente a Miller. Y quizás si Iñárritu dejara de lloriquear sobre lo difícil que es grabar arrastrándose en la nieve con un equipo de producción millonario, podría ver que todos los directores tienen sus propios retos y mientras en otros casos incluye el lidiar con temas particularmente delicados (como en «La habitación» o «Spotlight») y en este caso en particular, con grabar en medio del desierto de Namibia con máquinas que escupen fuego y gente haciendo malabares sobre plataformas en movimiento (y con fuego). Si eso, sumado a un resultado tan excepcional como delirante, no es destacarse en la dirección, no tengo idea de qué sea.

Mejor Documental: «Cartel Land«

Tengo sentimientos encontrados con una categoría porque hay muy buenos exponentes este año y porque una parte de mí le daría el premio a Joshua Oppenheimer independientemente de lo que esté presentando (que es lo que creo que podría pasar). En el 2014 «El acto de matar» no se llevó la estatuilla pese a tratarse no sólo del mejor documental de esa edición sino probablemente de uno de los documentales más importantes de la historia de este género. «La mirada del silencio», con el que está nominado en esta ocasión, es otra visión del mismo conflicto pero con un formato mucho más usual y sin el riesgo ideológico, moral, psicológico y ético que representaba el otro. Pero ya sabemos que a los Oscares les encanta dar premios de compensación. Por otro lado, «Cartel Land» asume el reto de sumergirse en situaciones límite como son los grupos de autodefensa en Michoacán y los paramilitares estadounidenses en la frontera. Pese a no tener una estructura muy sólida, el compromiso de sus imágenes y la labor documental en sí destacan sin duda por sobre otros muy buenos candidatos como «What happened, miss Simone?» o «Winter on fire» (inentendible que «Amy» pueda ser un favorito).

Mejor Película Extranjera: «Mustang«

Una categoría que usualmente suele ser mi favorita, al presentar un aspecto diferente de la entrega, ha sido una verdadera desilusión este año. No he visto todavía «El abrazo de la serpiente» ni «El hijo de Saúl» (que es la gran favorita) pero ¿cuánto tiempo más van a seguir ganando las películas sobre el holocausto? De las tres opciones que me quedan elijo sin demasiada emoción a «Mustang», una película que me parece tiene una buena premisa y una buena serie de elementos técnicos (y que además no tarda en transformarse en unas «Vírgenes suicidas» turca) y que sin embargo no terminó de despertarme ninguna emoción, algo que me parece vital por su tipo de planteamiento. Si bien, además de su cautivante puesta en escena, me parece muy interesa el tema que maneja sobre los contrastes sociales en un país con panoramas tan distintos como Turquía, desde una perspectiva de género. Y me parece una verdadera pena que con todo eso no consiga terminar de ser una excelente película. Lo mismo me sucede con «Theeb», primera película jordana en ser nominada, y por otro lado está «Krigen», cuyo tema me interesa menos pero creo que está mejor manejado, aunque no termine de asestar su golpe.

Mejor Película Animada: «Anomalisa«

Ok, tampoco vi «Anomalisa». Pero, siguiendo los pasos de todos esos miembros de La Academia que tampoco vieron «Frozen», a ciegas me parece importante recordar en esta categoría que no toda la animación que se produce es infantil y que esta limitada fracción sin duda vale la pena. También porque voy a confesar que las dos películas que vi, «Intensamente» (la que seguro ganará) y «When Marnie was there» no me gustaron nada. Quizás porque ambos tienen personajes pre-adolescentes es que son tan odiosos, pero incluso sin eso no me parecen los mejores representantes ni de Pixar ni, mucho menos, de Ghibli.

Y sí, estos no son ni de cerca todas las categorías, pero ya saben que para todo lo que esté, voto por «Mad Max», y de cualquier modo no sé si soy la mejor persona para discernir qué significa «Best Achievement in Sound Mixing».

Y ya saben, aprovechando que mañana es 28, todos vayan acompañados por su San Juditas de confianza en espera de que Miller y Furiosa hagan un poquito más de historia de la que ya han hecho en todos nuestros corazones.