Como amante indiscriminado del cine de terror, pocas cosas hay más emocionantes que descubrir una cinematografía nueva, con sus extrañas particularidades, y ver que pese a los problemas usuales de las producciones pequeñas, hay algo ahí que funciona y que promete. ¿Qué sabíamos del cine de terror de Turquía hace algunos años? ¿Qué tanto sabemos de Turquía en general? Y aunque sus inicios puedan no ser los mejores, a la saga de «Dabbe» la estamos conociendo con sus secuelas más actuales y lo que ha cambiado desde su rústica opera prima es abismal.
En 2006, Hasan Karacadag escribió y dirigió la primera «D@bbe» (con todo y esa horrible arroba) como muchos directores en países que no tienen tradición del género de terror: copiando descaradamente producciones que habían funcionado en otros lados. Como para ese año las producciones estadounidenses ya habían sido destronadas en ese terreno, las referencias apuntan claramente hacia «Kairo» de Kiyoshi Kurosawa pero en un país que, al parecer, hace diez años no tenía idea de cómo funcionaba el internet. Lo único que tenían claro es que podía incitar a las personas a suicidarse de un modo u otro. Burda, con terribles efectos y decisiones artísticas, lo sorprendente es que después de eso el director decidiera que éste era un sueño al que valía la pena aferrarse. Y vaya que valía la pena.
Seis años y dos películas después el director habría aprendido a dominar la sutileza aunque fuera aprovechándose todavía de otras cintas. La tercera parte de este ensamble sería una reproducción de la famosa «Actividad paranormal». Pero de la secuela que vamos a hablar actualmente es la cuarta, el punto más alto hasta el momento (no he visto todavía la sexta) en una serie que sin duda parece evolucionar a cada paso que da. Para el 2013, año de su estreno, nos encontramos con una trama que aunque no es precisamente original, parece emular ya subgéneros más que producciones específicas. «Cin Çarpmasi» es una de las típicas películas en que un científico y un creyente ponen a prueba sus perspectivas sobre la vida enfocándose en un mismo paciente, el cual puede estar lo mismo poseído que mentalmente enfermo (nosotros ya sabemos la respuesta). Ese paciente es Kübra, una mujer que en su noche de bodas fue poseída por espíritus y que ahora debe permanecer encerrada, rechazada por su pueblo (un pueblo, por otra parte, muy acostumbrado a que los espíritus anden por ahí poseyendo gente). Ebru, una psiquiatra y pariente de Kübra quiere demostrar que todas esas habladurías no son más que la explosión de una enfermedad mental que no está siendo adecuadamente tratada, pero no desaprovecha la ocasión para grabar todo el proceso mientras comparar sus procedimientos con los de Faruk, un experimentado exorcista. Y nosotros ya sabemos que nada de esto puede salir bien, pero todavía no sabemos cómo.
Hemos visto cine de exorcismos con toda clase de variantes, pero éstas han sido siempre occidentales. Y aunque el resumen de imdb nos advierte que lo presentado ‘no refleja la perspectiva de la religión islámica sobre estas cuestiones’, es sin duda un incentivo para captar nuestra atención. El único elemento que une todas las películas de la saga de «Dabbe» es la presencia de djinn o genios, que fuera de lo que quiera convencernos Aladdín, son criaturas cuasi demoniacas que se ajustan a las distintas tramas buscando algún tipo de compensación sangrienta. Es un genio lo que se cree ha poseído a Kübra y lo que asola el pueblo desde hace años, pero no conocemos el origen de la maldición (ni nosotros ni Faruk) ni lo que están buscando con esas posesiones.
Aunque la película todavía peca de tomar algunas decisiones que parecen de amateur (o de director que no sabe cuándo sus efectos especiales le piden que se detenga), la mejoría se percibe en casi todos sus elementos y la trama consigue presentarse de manera más que apropiada para resultar atractiva y efectiva. Las actuaciones han mejorado sustancialmente, el énfasis que se hace en los elementos culturales y religiosos es más profundo, la estética está mucho más cuidada y tiene una serie de escenas espectaculares. Que no pierden su fuerza ni siquiera junto a esas otras escenas (sobre todo hacia el final) que sería mejor olvidar. Porque en el cine de terror no siempre es buena idea mostrar todas tus cartas bajo la manga.
Si es cierto que las «Dabbe» destacan sobre todo por su condición de exotismo, a lo largo de un trabajo de varios años Karacadag ha conseguido ser algo más que casi el único representante del cine de terror de su país (ya el año pasado Sitges estrenó otras películas de terror turcas) para colocarse en el panorama internacional con una propuesta que, si bien todavía necesita pulirse, no deja de ser interesante y fresca en algunos sentidos. Y dado que no es necesario ver la saga en orden y ésta ha sido la semana de ‘no hay cuarto malo’, ya saben que pueden darle una oportunidad a «Cin Çarpmasi».
Y luego podrán planear sus vacaciones en Turquía visitando pueblos malditos.
«Dabbe: Cin Çarpmasi» (que al parecer significa algo así como «La maldición del djinn») es una película turca del 2013. Dirigida por Hasan Karacadag («Semum», «Magi», todas las otras «Dabbe») y protagonizada por Elcin Atamgüc, Sabriye Günüç, Sultan Köroglu Kiliç, Cansu Kurgun, Irmak Örnek y A. Murat Özgen. Tiene 7.1 estrellitas en imdb, lo cual parece bastante para una cinta de terror.
Me parece muy peculiar por eso me llamo la atencion las veré :) muchas gracias Sam n.n/
Interesante, muy interesante y más lo es por que parece que en estos momentos el cine Turco está en auge,en los últimos meses he visto al menos unas seis películas de esa nacionalidad entre terror y dramas, otra cosa ¿se puede saber donde viste las películas de la saga que reseñas Sam? y por cierto ¿ya viste Baskin?
¿Como que disney me engaño y los genios no son azules y hacen imitaciones? ¿Como que en Turkia no hacen turcos? He vivido engañado, buena reseña Sam supongo que valdrá la pena por una version de exorcismo no oficial turko.