Cine 130: La Habitación

En un año en el que entre las nominadas parecen haber pocas películas verdaderamente arriesgadas y poca producción independiente, «La habitación» sorprende por haberse colado en las principales categorías sin tanto bombo y platillo, resultando probablemente la película de la que menos se ha hablado en ese aspecto (quizás porque Iñárritu está demasiado ocupado hablando por todos los demás). Pese a sus pocas ambiciones de producción y su poco espectacular propuesta, resulta sin embargo uno de los pocos casos en esta próxima entrega que nos hacen sentir que no todo está tan mal en el mundo de los premios después de todo.

Y sin embargo, parece que a Jacob Tremblay le faltó arrastrarse por toda la nieve de Canadá para que se reconozca lo increíble actor que es a tan corta edad.

«La habitación» es el mundo de Jack y su madre Joy, lo único que existe para ellos. Un limitado espacio donde tienen que realizar todas sus actividades diarias y al que sólo puede acceder el viejo Nick en sus esporádicas visitas. En un delicado equilibrio con la fantasía, no tardamos demasiado tiempo en darnos cuenta qué es lo que realmente se esconde en esa habitación y el cuento que se ha montado Joy: ella lleva años secuestrada por el viejo Nick y obligada a criar a su hijo en ese escondite. La elaborada historia del espacio exterior y la gran farsa de todo lo que no es la habitación es el único modo en que ha podido evitarle a Jack la crueldad de la realidad, pero no es una mentira que podrá sostener por demasiado tiempo.

La película cuenta la historia desde las dos películas de ese cuarto: el adentro y el afuera. Sin buscar configurarse como un thriller o basar su desarrollo en giros inesperados, el planteamiento dual será que la transición de un punto al otro no será tan fácil como podría haberse esperado. La libertad no es únicamente la elaboración de un plan que pueda llevarlos de vuelta a la vida que Joy ha perdido pero que Jack jamás tuvo. Después de toda la construcción de una elaborada fantasía que permitiera a su hijo algo así como una infancia normal, Joy se dará cuenta de que ahora tiene que reconfigurar también ese ‘mundo real’ soñado, una labor equiparable a lo difícil que fue construir el ficticio.

La película se sostiene sobre las poderosas actuaciones del dúo protagonista: una Brie Larson que pese a su desaliñado aspecto y su constante posición de desventaja se revela como una mujer fuerte y con un firme instinto de supervivencia, pese a los baches en la improvisada relación con su hijo; y Tremblay, todo un descubrimiento, y quien es capaz de interpretar con una increíble naturalidad las escenas más tiernas y las más duras.

Las referencias a la habitación (la física y la emocional) definen no sólo el principio de la historia sino también la relación entre la madre y su hijo: una particular circunstancia que los une pero también los ata el uno al otro, en contraposición con todo lo demás, lo exterior. Esa sensación de encierro, que se repetirá con diferentes matices y de distintos modos, definirá una película sumamente íntima que consigue hablar de emociones tan universales como la libertad, los giros inesperados en la vida y la maternidad.

Aunque dista de ser una de las favoritas (y es una pena que «Mad Max: Fury Road» no sea la única favorita), ha logrado el reconocimiento de sus principales elementos en los próximos Oscares: mejor película, mejor actriz protagónica, mejor director y mejor guión adaptado; así como más de 60 reconocimientos en varias ceremonias. Nada de lo cual necesita realmente para agradecer que se aparezca en una temporada con pocas sorpresas, para recordarnos que todavía hay historias personales que valen la pena contarse sin necesidad de pasar por esa grandilocuente reinvención de Hollywood (como es el caso de la terriblemente desaprovechada «La chica danesa» y de tantas otras).

Ya hablando de sorpresas…

Tremblay listo para luchar a puño limpio por ese Oscar.

(¿qué? ¿que no está nominado? Qué dices)

«La habitación» o «Room» es una coproducción del 2015 entre Irlanda y Canada. Dirigida por Lenny Abrahamson («Frank», «What Richard did», «Dublin 26.06.08: A movie in 4 days») y protagonizada por Brie Larson («21 jump street», «Short term 12», «The spectacular now»), Jacob Tremblay («Santa’s little ferrets», «Los pitufos 2», «Gord’s brother»), Sean Bridgers («Sweet home Alabama», «The woman», «Jug face»), Joan Allen («The Bourne supremacy», «Face/off», «Death race») y Tom McCamus («The sweet hereafter», «Possible worlds», «I love a man in uniform»). Tiene 8.3 estrellitas en imdb, 7.7 en filmaffinity y 96% en el tomatometro. Y mi sincera recomendación.