Cine 60: X-Men: Días de un Futuro Pasado

Y si Godzilla, la semana pasada, ya nos había regresado a las emociones de nuestra niñez, los «X-Men» ahora están para regresarnos a ¿los 70?

Esta reseña sería mucho más fácil si pudiera sólo spoilearles todo con un tonito irónico que hiciera sonar a la nueva producción de Bryan Singer como esas tramas surreales propias de los cómics de los años 80.

¡Y además son gitaaaaaaaaaanos!

¿Recuerdan que alguna vez existió un cómic llamado «Días del futuro pasado»? Ja, qué tiempos aquellos.

Baby, let’s groove.

Así que, tenemos un futuro apocalíptico. Tenemos a Kitty Pryde (siempre da gusto ver a Ellen Page en pantalla grande). Y tenemos la imperiosa necesidad de mandar a alguien al pasado a arreglarlo. Y si alguien va a ir al pasado y aparecer en muchas más tomas que el resto de los mutantes futuristas, ese tiene que ser Hugh Jackman, por supuesto.

Yo hubiera votado porque también saliera más tiempo sin camisa, pero no se puede todo.

En el pasado están los X-Men babies, que todos recordamos de «First class», pero todos peleados y tirados al carajo. Wolverine, que no es precisamente dado a las sutilezas, tiene que convencer al menos a Xavier y a Magneto para que hagan las pases y salven al mundo evitando que Mistyque asesine al creador de los Centinelas. ¿Ya les va sonando todo? Mutantes más, mutantes menos, una ambientación muy retro y todos los enredos mutantes que uno podría esperar de este elenco.

Independientemente de que es claro que por más adaptación que sea no tiene por qué ser del todo fiel al cómic original (aunque también es cierto que para lo corto y conciso que es, no habría sido tan difícil), parece inevitable notar que Bryan Singer parece seguir una línea bastante clara de ‘darle al público lo que quiere’, que era parte de su sello en la trilogía original de la franquicia. ¿A todo mundo le gusta Wolverine? ¡Pues démosle más Wolverine! Lo cual no es necesariamente malo pero parece definir en gran medida las alteraciones en la historia. Regresar a Ellen Page en un momento en que su carrera vuelve a ser noticia, mantener prácticamente sólo a Wolverine del reparto original (con relevancia, pues), poner en primerísimo plano a los personajes de «First class» y sobre todo darle un subplot trascendental a Jennifer Lawrence ahora que todavía es la niña consentida de Hollywood, fusionar a Bolivar Trask con Robert Kelly para darle a Peter Dinklage el personaje más interesante de la película. Y una vez que todos ocupen sus lugares podemos empezar a hablar de futuros distópicos y pasados complicados y guiños a los cómics y odio mutante.

Eh…..sí, algo así.

Que «Días de un futuro pasado» (voy a asumir que el ‘un’ en realidad esconde una oscura referencia a que éste no será el único futuro-pasado que veremos) (gracias, Apocalipsis) es la mejor película al momento sobre los X-Men es casi un hecho, pero personalmente no creo que tenga mucha competencia. Sus efectos especiales están bastante más limitados y cuidados que en otras entregas (sobre todo esas en las que casi podías tocar la pantalla verde detrás de Wolverine) y en general se cuida la historia central para que funcione pese a los cambios y uno pueda concentrarse en la salvación del futuro en lugar de las miles de alteraciones. Incluso hay personajes que antes eran bastante insoportables y aquí asumen relativamente bien su rol.

Sí, te estoy hablando a ti.

Pero me parece que está lejos de ser una excelente película de superhéroes. Y entiendo que «X-Men» lleva las de perder en comparación con otras sagas, pero su esfuerzo se sigue quedando en un ‘aprobado’ decente que brilla sobre todo por escenas concretas y casi siempre fugaces. Guiños que están bastante dirigidos al público conocedor de los personajes pero que parecen tratar de suplir esa sensación de que, como en otras de estas producciones, la película fue hecha sin mucho verdadero amor por el cómic.

En parte es posible que la falta de contundencia en algún aspecto concreto haga que el resultado final me parezca un poco tibio, ya que en general casi todos los elementos me parecen bastante apropiados en su punto. Pero como si estuvieran esperando un golpe final que no termina de llegar. Y es que varias cosas parecían apuntar a ello. Por una parte está la falta de un verdadero villano, ya que ni Trask ni los Centinelas terminan por ocupar ese lugar. Las secuencias del futuro parecen bastante limitadas, sobre todo al aspecto de la acción, dando como resultado que todo el concepto de viajes en el tiempo parezca más una excusa narrativa que el origen fundamental de la trama. Fassbender es fantástico como Magneto pero le falta tiempo para ser más malo malísimo, o al menos darle más contexto a su personal lucha mutante. Bishop, bueno, supongo que tendremos que esperar al 2016 para saber qué onda.

Y bueno, toda esa gente que desconfiaba del diseño de los Centinelas, tenía toda la razón del mundo en hacerlo. Difícil creer que sea todo un reto hacer un robotote enorme de manera convincente.

De hecho, seguro que ya leyeron esto en alguna otra parte, pero lo mejor de todo es Quicksilver. Ya que Twentieth Century Fox luego regala spin-offs, debería darle uno.

¡Y luego puede pelear con su homónimo de Paramount Pictures!

Y seguro que todo esto suena a que soy una quejumbrosa pero les diré que está bien esperar que sus películas de superhéroes sean mejores. Twentieth Century Fox lo sabe y vean cómo ha mejorado la saga. Y de hecho debo decir que yo esperaba hacer muchos corajes durante la función y hasta resultó una película entretenida y bastante bien hecha. Si seguimos a este ritmo la incursión de Apocalipsis sólo puede ir a más.

Aunque insistan en seguir poniendo a Bestia.

«X-Men: Days of Future past» o «X-Men: Días de un Futuro Pasado» es una co-producción del 2014 entre Estados Unidos y Reino Unido. Dirigida por Bryan Singer («Sospechosos comunes», «X-Men» I y II, «Jack, el cazador de gigantes») y protagonizada por Hugh Jackman («The prestige», «Los miserables», «Wolverine»), James McAvoy («Narnia», «Wanted», «El último rey de Escocia»), Michael Fassbender («Bastardos sin gloria», «Prometheus», «300»), Jennifer Lawrence («Los juegos del hambre», «Silver linings playbook», «Winter’s bone»), Nicholas Hoult («Mi novio es un zombie», «Jack, el cazador de gigantes», «About a boy») y Peter Dinklage («Juego de tronos», «Narnia», «The station agent»). Tiene 8.8 estrellitas en imdb, 7.8 en filmaffinity y 90% en el tomatometro. Todo lo cual me suena al hype de su reciente estreno. O a que la gente ya no tenía fe en que nada bueno saliera de «X-Men». Pero, sí, hasta recomiendo ir a verla, y seguro la tienen en todos sus cines cercanos.