¿Qué les puedo decir? Yo alguna vez fui fan de Olallo Rubio.
Mi primera impresión, claro está, es que la película debió llamarse «Desilusión nacional». Pero viendo que todavía hay gente emocionada porque vayamos al Mundial, me imagino que el título está más que justificado. No es que tratándose de fútbol (sobre todo tratándose de nuestra selección) me interesara demasiado. Más si tenemos en mente al fantasma del primer documental de Rubio, «¿Y tú cuánto cuestas?». Pero los años han pasado, todos hemos visto algún partido de fútbol (aunque sea por escuchar a Martinoli quejándose de todo) (me encanta), démosle unos pesos al cine mexicano.
Además de lo divertido que es ver a la gente sufrir en la cancha.
¿La película parte de la decepción o de la esperanza? Difícil decirlo cuando nuestra introducción es la historia del fútbol en México y nos encontramos con un panorama que si bien quizás no conocemos en detalle, no es tan difícil de imaginar: muchas pérdidas y pocas victorias. El interés del director-narrador parece partir de esa extraña noción de cuan apasionado es el mexicano promedio por su selección cuando ésta no parece corresponder en igual medida.
Lo que tú y yo necesitamos sólo es tiempoooo ♫
Pero ¿hacia dónde va esta ‘ilusión nacional’? En entrevistas Olallo Rubio ha dicho que lo que quería era retratar ese sentimiento de ‘se siente gacho cuando perdemos pero se siente bien chido cuando ganamos’ que seguro es parte de lo que mantiene la llama encendida. Lo cual de algún modo significa que más que un documental en forma, que gire alrededor de una hipótesis específica y busque llegar más o menos a una respuesta, nos subimos aquí en una montaña rusa de emociones que nos guían desde la historia hasta la actualidad, de la desesperación a la inesperada alegría, de la corrupción hasta la violencia.
Todo esto pareciera decirnos que el fútbol permite (y hasta enaltece un poco) toda esta clase de perspectivas: que puede ser una expresión política del momento o una suma de videos de gente golpeándose. Que puede llevarnos hasta Miguel de la Madrid forzando a una ciudad en ruinas a ser sede del Mundial o hasta Hugo Chávez aprovechando su carrera para sacar una terrible canción (en ese momento «Rudo y Cursi» tuvo un poco más de sentido). Todo lo cual, desde la perspectiva del documental, tiene sus ventajas y desventajas. Más que una investigación seria y con metodología periodística (que está claro no es lo que busca el director), es una serie de reflexiones sobre la historia y la pasión del fútbol en México que nacen desde la ignorancia pero también desde el fanatismo (Rubio no sabía mucho del tema antes de empezar a plantearse el proyecto pero en el camino se convirtió en un seguidor más). Y esto funciona si ya sabes cómo son las disertaciones de Olallo Rubio y las disfrutas (quien sin duda ha ido mejorando bastante en estructura y narrativa), o si te gusta el fútbol y sencillamente quieres emocionarte viendo esas imágenes tan bien editadas para lograr cierta narrativa, o si no sabes absolutamente nada del fútbol pero no te molesta descubrirlo (y/o disfrutar de todos esos videos de goles idiotas o gente dándose de putazos).
Pero está claro que del mismo modo que funciona para ese sector del público, seguro que le caga la madre a otro gran sector del mismo. Las notas sobre el documental están llenas de comentarios quejándose sobre la selección, el fútbol en México, Olallo Rubio, el cine en México, todos los anteriores. Está claro que ninguno es una monedita de oro y el tema da para amarlo y odiarlo. Y la producción no está hecha para conciliar, no está hecha para convencer, nadie va a descubrir el hilo negro de la irracional pasión por este deporte. Así que no va sabiendo que de algún modo es posible que lo disfrute, o mejor no se toma la molestia.
Hay muchos elementos para divertirse: por diox vean esos uniformes.
Yo, desde mi total ignorancia futbolística y mis prejuicios contra las producciones audiovisuales de Olallo Rubio, debo confesar que después de una introducción que seguí por mero interés histórico, terminó por resultarme entretenido y en algunos puntos hasta me acerqué a ese sentimiento de ‘pero qué chido es cuando ganamos’. Sólo un poco. Así que ya saben, por una vez que el cine mexicano no nos ofrece dramas violentos o comedias románticas, quizás habría que aprovechar.
Podrán darse cuenta que no hay muchas variedad en las imágenes que puedo encontrar sobre el documental.
Ahora, en los mensajes de ‘Servicio a la Comunidad’ de Sam: Gente, si quieren ir al cine a hablar con sus amigos como si vieran un partido de fútbol, mejor quédense en sus casa a ver partidos de fútbol. Aparentemente uno de los riesgos de esta película en particular es el tipo de público que puede atraer. Y aunque entiendo que estamos todos hermanados en la experiencia del cine y en la emoción de las recreaciones futbolísticas, no duden que alguien de la sala podría querer llegar a matarlos si hablan más de la cuenta. (Yo tendría muchos más arranques cívicos sino fuera porque en esta ciudad ya nunca sabes quién es un asesino en potencia)
Oh, pero estábamos hablando de lo bonito que es el fútbol. O algo así.
Yo sé, yo sé. Los estrenos de estas semanas no emocionan demasiado. Y yo que sigo sin ver «Capitán América 2».
«Ilusión nacional» es una película mexicana del 2014 dirigida por Olallo Rubio («¿Y tú cuándo cuestas?», «This is not a movie», «Gimme the power») y protagonizada por muchas grabaciones del fútbol a lo largo de los años. Tiene 6.9 estrellitas en imdb (aunque apenas ha sido calificada por 70 usuarios). No tiene todavía suficientes votos en filmaffinity y no tiene siquiera ficha en rottentomatoes. Supongo que nada de eso es muy alentador pero yo me mantengo con que, si eres del público correcto, puede resultar inesperadamente entretenida. Y ya saben, sigue en cines.
Es hora de The Amazing Spiderman 2, ¿no creen?
a mí me dijeron que sale Eduardo Galeano y me parece razón suficiente pa´ver la película.
Pues no aparece él pero sí citan algunas de sus impresiones sobre el fútbol que, como todo lo que escribe Galeano, son fantásticas y le dan una dimensión nueva a cualquier cosa.
Que pasooooooo Olallo!
Pamboleros…pamboleros everywhere.
Lei hasta donde pude, es que el futbol me da una weba… xD
Sentí demasiado corta la reseña en cuanto al contenido… pero aún así me gustó, y estoy completamente de acuerdo con la parte de »Servicio a la Comunidad» haha, y bueno, tal vez la cheque, desde que vi »This Is Not A Movie» juré que no vería nada más de Olallo Rubio por mi propio bien, pero si tú dices que está entretenida, le daré el beneficio de la duda.
La verdad es que sí, pero tratándose de un documental creo que es más difícil hablar mucho sobre el contenido.
Muy buena reseña, el documental ya lo vi, he de decir que me gusto bastante y eso que tampoco soy fan del futbol ni de la selección. El estilo del Olallo se presta muy bien para documentales y es bueno ver que ha mejorado desde ¿Y tu cuanto cuestas? solo esperemos que ya no le de por hacer cosas como This is not a movie.
Con tantos malísimos comentarios de «This is not a movie» no me animé a verla en su momento pero ahora hasta curiosidad me da jaja
Concuerdo contigo, la fui a ver porque no encontré nada mejor. Mis expectativas eran bajísimas y salí con un agradable sabor de no tirar los puntos de Cinepolis a la basura.
No me latió la onda política… Pero si conocemos a Olallo sabíamos a que nos podíamos enfrentar.
En general vale la pena, la onda histórica me latió (ya soy chavoruco que le toco ir a un partido de México 86 )
De hecho yo temí que la onda política fuera mucho más extensa, justo por como es él. Con mi hermano bromeábamos que seguro lo del fútbol era una fachada para sus eternas digresiones políticas.
pos y tu cuanto cuestas? se me hizo aburrida, this is not a movie malisima, gimme the power se me hizo chida, cabe mencionar que e escuchado las 5 temporadas de su podcast ( el de olallo) y se me hace una persona entretenida que se contradice siempre pero al final entretenida, hasta donde recuerdo el buen olallo odiaba el futbol xD, pero ya que sus pinches podcaste son tan entretenidos tendre que ir al cine.
Pues sí, recuerdo ese capítulo de su podcast cuando se vuelve ‘podcast latino’ y parte de la burla es que en América Latina todo tiene que ver con fútbol. Pues hasta él cayó. Leí que fue cuando México ganó la medalla de oro en las Olimpiadas que a todos agarró por sorpresa cuando pensó que debería hacer el documental, e investigando hasta él se convirtió a la pasión futbolera.
Yo no sabia que existía esa película, ahora que lo sé,no tengo interés en verla. Aun así es muy buena tu reseña Sam. Te aseguro que me divertí más leyendo tu escrito que si hubiera visto ese pseudo documental como los que suele hacer Olallo Rubio. :-) :yes:
¡Al menos la reseña funcionó para eso! :P
Futbol?? por que una reseña de un documental, de futbol y de olayo !!!! si no te gusta a ti ni a nosotros… xq? q te paso sam antes eras chevere ! :-P
no hables por todos….. jeje XD